Tras un accidente Lucía descubre que le queda poco tiempo de vida, es por ello que desea volver a Galicia, a un lugar donde el recuerdo y la nostalgia le prometen la felicidad y tranquilidad, como uno de los últimos deseos que tiene antes de abandonar el mundo.
En todo el proceso le sigue su pareja Julián, que confuso y temeroso por toda la situación parece cerrarse en si mismo. Todo cambia en el momento en el que Lucía quiere ir al pueblo de su infancia, al cual no duda en llevarla.
No es un libro que me haya gustado especialmente, a pesar de que tiene una historia buena y me gusta como está escrita, toda la carga de nostalgia se me hace pesada, aunque no llega aburrir porque no es demasiado largo, cosa que hace que no te deje un mal sabor de boca.
Achaco mi poco entusiasmo a que a día de hoy no conecto con lo que le pesa a los personajes, y no llego a tener empatia ni simpatía con ninguno de ellos, a pesar de que lo que les sucede da pie a que suceda eso.
Los lugares que describe y que significan es uno de los puntos fuertes, como nos presentan Galicia, en especial el pueblo de Lucía, un lugar que apenas parece haber cambiado en el tiempo, donde la nostalgia parece que se ha quedado. Todo ello en contraste con la vida de la pareja en Madrid, que nos trasmite perfectamente lo pintoresco del barrio, la actualidad y el urbanismo.
Aunque la atmósfera que se crea no me guste demasiado, consigue que este presente en todo el libro, a través de los lugares, los anhelos y recuerdos de Lucía. La nostalgia es el eje del libro, y el autor, Manuel de Lorenzo sabe transmitirla y envolverte.
El libro básicamente habla sobre los sentimientos que tienen los personajes en una situación tan delicada como es los ultimas semanas de vida de la protagonista, y como realizan ambos el camino para liberarse del dolor o gestionarlo.
Lucía siente que la forma de estar satisfecha y en paz consigo misma es visitar el pueblo que una vez visito de pequeña. Puede ser para reconciliarse con ella misma, e incluso con su madre, con la cual no tuvo la mejor relación. El deseo de volver a donde fue feliz, y desear que todo siga como antes. Pero cuando llega allí algunas cosas si han cambiado, y se encuentra a una vieja amistad.
Por otro lado, Julián se encierra en si mismo, y no le deja ver que no está con Lucía tanto como debería en una situación como esa. Sentimientos encontrados, frustración y no saber que hacer o como actuar, solo le queda seguir a Lucía para que sea feliz y con eso conseguir algo de paz interior él mismo.
Comentarios
Publicar un comentario